Chaque jour (Cada día)
Chaque jour, J’attends que tu reviennes / Cada día, Espero que tu vuelvas
Chaque jour, Mais tu ne reviens pas / Cada día, Pero tu no vuelves
Chaque jour, Je me rejoue la scène / Cada día, Yo me represento la escena
Chaque jour, Mais les mots ne viennent pas / Cada día, Pero las palabras no vienen
Chaque jour, Je remonte dans l’arène / Cada día, trepo en la arena
Chaque jour, Mais je ne fais pas le poids / Cada día, Pero no lo logro
Chaque jour, Que le bon Dieu amène / Cada día, Que el buen Dios trae
À Chaque jour, C’est l’enfer ici bas / A Cada día, Es el infierno aquí abajo
Chaque jour, À Chaque jour suffit sa peine / Cada día, A cada día basta su pena
Chaque jour, La mienne ne s’en va pas / Cada día, La mía no se va
Chaque jour, La triste loi de la moyenne / Cada día, La triste ley de la media
Chaque jour, Me nivelle par le bas / Cada día, me nivela para abajo
Chaque jour, Juste une chose certaine / Cada día, Sólo una cosa cierta
Chaque jour, J’avance vers le trépas / Cada día, Avanzo hacia la muerte
Chaque jour, Que le bon Dieu amène / Cada día, Que el buen Dios trae
À Chaque jour, C’est l’enfer ici bas / A Cada día, Es el infierno aquí abajo
Chaque jour, Les nouvelles sont les même / Cada día, Las noticias son las mismas
Chaque jour, Les hommes n’apprennent pas / Cada día, Los hombres no aprenden
Chaque jour, La paix semble lointaine / Cada día, La paz parece lejos
Chaque jour, Tombe tombe les soldats / Cada día, caen caen los soldados
Chaque jour, La déchéance américaine / Cada día, La decadencia americana
Chaque jour, Souris pour la caméra / Cada día, Sonríe para la cámara
Chaque jour, Que le bon Dieu amène / Cada día, Que el buen Dios trae
À Chaque jour, C’est l’enfer ici bas [bis] / A Cada día, Es el infierno aquí abajo [bis]
Lundi, Mardi, Quelle différence / Lunes, Martes, Qué diferencia
Mercredi, Jeudi, Rien n’a de sens / Miércoles, Jueves, Nada tiene sentido
Vendredi, Samedi, Vivement dimanche / Viernes, Sábado, Vivamente domingo
Et Dimanche, Dimanche, / Y Domingo, Domingo
Pas de repos pas de chance / No hay descanso no hay oportunidad
Le lendemain, ça recommence / Al día siguiente, recomienza
Et si un jour il fallait que tu reviennes / Y si un día fuera necesario que tu vuelvas
Je jure que ce jour, tu ne me reconnaîtrais pas / Juro que ese día, no me reconocerías
Je jure que ce jour, j’aurai une énergie soudaine / Juro que ese día, tendré una energía súbita
Je jure que ce jour, je ne baisserais plus les bras / Juro que ese día, no bajaría ya los brazos
Et si un jour tu rallumerais mes semaines / Y si un día iluminaras mis semanas
Je jure que ce jour, je réécrirais l’agenda / Juro que ese día, reescribiría la agenda
Chaque jour, Chaque jour en vaudrait la peine / Cada día, Cada día valdría la pena
Chaque jour c’est l’amour / Cada día será el amor
Que je chanterai ici bas / Lo que cantaré aquí abajo
Chaque jour, Ça ira mieux demain / Cada día, “Irá mejor mañana”
Chaque jour, Jamais demain ne viens / Cada día, Nunca llega mañana
Chaque jour, Ça ira mieux demain / Cada día, “Irá mejor mañana”
Chaque jour, Tout remettre au lendemain / Cada día, Posponer todo para el día siguiente
Chaque jour, Ça ira mieux demain / Cada día, “Irá mejor mañana”
Chaque jour, Demain sera toujours le même / Cada día, Mañana será siempre lo mismo
Puis un jour, Se redire qu'il faudra bien / Luego un día, decir otra vez que todo estará bien
Un de ses jours / Uno de sus días
Prendre son vide en main [Bis] / Tomar su vacío en mano [Bis]
Chaque jour, J'attends que tu reviennes / Cada día, espero que tu vuelvas
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
(Podría ser sólo una canción romántica, aunque…)
En Chaque jour leo el sufrimiento de la gente sin fe. Clamando por un Dios que no viene, por el mal en el mundo (no estoy tan errado, según dicen aquí).
Pero no descubren que su fe está presente, al mismo momento en que, por ejemplo, cantan canciones a favor de cuidar el planeta. ¿Por qué cuidan al planeta, si no? Por amor a alguien, aunque sea a quien vivirá aquí en el futuro. O en el momento en que cantan canciones por la paz. ¿En quien piensan? ¿Por quién se preocupan?
Amás, y no sabés que cuando amás está Dios. Con vos, haciéndote amar. Cada vez que amás, apostás a la vida y a Dios. Dios es amor.
Y no digas que si alguna vez Él viene, no bajarás más los brazos. Eso es trampa. Ya los bajaste. (¿O quizás no los bajaste, sólo decís que los bajaste?)
¿Y si Él viene tendrás una energía repentina? No te mientas. Si viene no lo reconocerás. (¿Un signo? No será dado. Porque abundan).
¿Ese día que Él venga cantarás al amor? ¿No estás viendo que está delante tuyo? Que estás amando. Que puedes amar más aún.
Que el sufrimiento del mundo es la ocasión para amar. Que está todo junto. Lo que no querés ahora y lo que esperás hacer después. Van ahora, juntos, el sufrimiento y el amor.
(La fe es consuelo, por supuesto. Tonto es no querer consuelo. Tonto es pensar que no tiene porque haber consuelo. Al contrario, si necesitamos consuelo, ¿qué más sincero con uno mismo que buscarlo?. La fe no es “no hacerse cargo”. Al contrario. Asumir la necesidad de consuelo y buscarlo es hacerse cargo).
¿Por qué este misterio del hombre? No lo sé. Sólo puedo tomármelo en serio.
(Dejar nuevamente los mismos versos como cierre: “Chaque jour, j’attends que tu reviennes”, creo que es un gesto esperanzado; porque la misma declaración que se puede hacer como reproche, se puede asumir como algo legítimo; después de todo, no se trata de consolarse sólo aceptando el mal: se espera que algún día Él venga a ponerle fin).
En Chaque jour leo el sufrimiento de la gente sin fe. Clamando por un Dios que no viene, por el mal en el mundo (no estoy tan errado, según dicen aquí).
Pero no descubren que su fe está presente, al mismo momento en que, por ejemplo, cantan canciones a favor de cuidar el planeta. ¿Por qué cuidan al planeta, si no? Por amor a alguien, aunque sea a quien vivirá aquí en el futuro. O en el momento en que cantan canciones por la paz. ¿En quien piensan? ¿Por quién se preocupan?
Amás, y no sabés que cuando amás está Dios. Con vos, haciéndote amar. Cada vez que amás, apostás a la vida y a Dios. Dios es amor.
Y no digas que si alguna vez Él viene, no bajarás más los brazos. Eso es trampa. Ya los bajaste. (¿O quizás no los bajaste, sólo decís que los bajaste?)
¿Y si Él viene tendrás una energía repentina? No te mientas. Si viene no lo reconocerás. (¿Un signo? No será dado. Porque abundan).
¿Ese día que Él venga cantarás al amor? ¿No estás viendo que está delante tuyo? Que estás amando. Que puedes amar más aún.
Que el sufrimiento del mundo es la ocasión para amar. Que está todo junto. Lo que no querés ahora y lo que esperás hacer después. Van ahora, juntos, el sufrimiento y el amor.
(La fe es consuelo, por supuesto. Tonto es no querer consuelo. Tonto es pensar que no tiene porque haber consuelo. Al contrario, si necesitamos consuelo, ¿qué más sincero con uno mismo que buscarlo?. La fe no es “no hacerse cargo”. Al contrario. Asumir la necesidad de consuelo y buscarlo es hacerse cargo).
¿Por qué este misterio del hombre? No lo sé. Sólo puedo tomármelo en serio.
(Dejar nuevamente los mismos versos como cierre: “Chaque jour, j’attends que tu reviennes”, creo que es un gesto esperanzado; porque la misma declaración que se puede hacer como reproche, se puede asumir como algo legítimo; después de todo, no se trata de consolarse sólo aceptando el mal: se espera que algún día Él venga a ponerle fin).
Suerte en este viaje que comienzas ahora, Juan Ignacio.
ResponderEliminarGracias, Fernando.
ResponderEliminarEsto es más un ejercicio personal que un blog, pero lo he abierto porque un solo aporte de otra persona puede ser más fructífero que mil monólogos.